Soy un zombi.
Me levanto a las 05:30 de la mañana. Así, como lo oyes.
Seguro que muchos de vosotros también lo hacéis y no os importa. Pero a mí sí.
Y mucho. Digamos que me jod* una barbaridad.
El caso es que cuando apago el despertador y me incorporo —si no lo hago inmediatamente me vuelvo a quedar frito— tengo el cerebro tan líquido que no me da ni para cabrearme.
El lunes tira que va, estoy en niveles decentes de energía, pero según avanza la semana mis deseos de cambiar de vida son mayores.
No de irme a la otra vida. De momento no. Pero sí de hacer algo para que cuando me levante, la conciencia de ser una persona humana sea inmediata, y no como ahora, que la sensación de vivir llega media hora más tarde.
Mi intervalo horario más productivo es a partir de las 11 de la mañana y luego me puedo quedar funcionando casi a tope hasta última hora de la tarde.
Es decir, antes de las 11:00 sigo siendo un zombi.
Que sí, que puedo realizar tareas básicas como desayunar o no mearme encima, incluso trabajos de sota, caballo y rey, pero es a partir de mi pico productivo cuando puedo ser de los mejores de mi Unidad.
Esto no me pasa a mí solo.
Le sucede a millones de personas en el mundo.
Millones de personas que desaprovechan su potencial —o mas bien, lo desaprovechan sus empresas— estando varias horas en un estado semi comatoso.
Incluso, hay gente que teniendo la oportunidad de ir más tarde a trabajar, no pueden.
Niños.
Atascos.
Circunstancias varias.
Vida de rueda de hámster…
Lo más que puedes hacer —y si puedes— es echarte una siesta. Pero no de pijama y orinal.
La NASA dice que una siesta de 26′ mejora la productividad en más del 34%, y otro estudio —de científicos que se aburren mucho— indica que una de 45′ aumenta tu capacidad cognitiva las 6 horas siguientes.
Joe.
Yo lo más que puedo hacer es dormirme en el tren 20′ cuando estoy hecho carbonato cálcico.
Y la verdad es que se nota.
Pero quizá estaría mejor no madrugar para no mendigar siestas.
Más estudios de esos fashion, dicen que al dormir mal desaprovechamos 1/3 de la comida.
Parece ser que fallan los mecanismos para fabricar insulina y los de extraer glucosa, base energética de nuestro cerebro.
Y ojo con lo que viene.
Si a una persona de 30 años la dejas durmiendo una mierda 6 noches seguidas —sobre 4 horas— su organismo generará una química parecida a la de una persona humana de 60 años.
Vamos, que es menos humana y es más walking dead.
Si no duermes lo suficiente, pasan estas cosillas sin importancia:
Ná. Poca cosa.
Y además estás más cabreao que un mono.
Para que no pase esto te podría decir lo que todos ya sabemos:
Eso ya lo sabes.
Pero hay dos cosas que no practicamos habitualmente y son tan difíciles como lo anterior.
Una es, que si no puedes dormir, levántate y medita —de eso hablaremos en otro artículo— y otra es que hagas ayuno de dopamina.
Este ayuno va de no ver la tele, tablet, móvil, e-reader o de que no comas algo rico, si no va a pasar al menos una hora antes de irte a la cama.
Si no lo cumples no te saldrán pelotas como a los Gremlins, pero dormirás peor si no lo haces.
—Pero es que yo quiero ver mi serie de Netflix antes de dormir…
Pues vale.
Sin problema.
Dormirás peor.
Además, la cena si es ligera te ayudará a 3 cosas:
¿Lo cualo?
Pues sí. Tus sueños son una fuente de conocimiento e información enorme que no sabemos aprovechar.
Y puedes aprender a utilizarlos a tu favor. Pero eso también para otro día…
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Un abrazo fuerte y hasta el próximo.
Tony
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PD1: Hay gente que por imagen no cogen un horario que beneficiaría a su salud.
¿Qué me dirían en la empresa si llego una hora más tarde aunque me corresponda?
—No quiero dar explicaciones y por eso no ejerzo el derecho a tener una flexibilidad horaria.
Ya. Lo entiendo.
Seguramente es porque tus jefes o empresa te lo agradecen a diario.
¿O no?
PD2: Si no madrugas porque no quieres, que sepas que eres un grandísimo privilegiado o privilegiada. Y si eres de los que te gusta madrugar y no te cuesta, pues genial, estás en la parte del mundo que te beneficia por imagen y obsolescencia del sistema.
PD3: Como cuento en los cursos, los niveles de necesidad de estimulación externa y la explicación del bucle córtico-reticular que dan lugar a la extroversión e introversión afectan mucho para entender el porqué te pones en marcha rápidamente o si necesitas más tiempo para empezar a funcionar.
¿Eres de los que le cuesta madrugar o de los que no?
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